“La escuela no hace al alumno, es el alumno el que hace a la escuela” resulta una frase muy presente sobre todo al momento de considerar si una institución es la adecuada para prepararte académicamente, ¿pero qué pasa cuando la decisión va más allá del prestigio o años de experiencia de una universidad?
Aunque ambas opciones representar una inversión, está claro que estudiar en una universidad privada no te garantiza una mejor preparación o experiencia así como una universidad pública tampoco te resta oportunidades laborales. La finalidad es que cada prospecto tenga la oportunidad de evaluar diversas opciones y elegir aquella universidad que se adapte mejor a sus necesidades, posibilidades y aspiraciones para su vida profesional.
DEJA UN COMENTARIO